Desarrollado durante la época navideña, suscitó polémica al quitar la palabra “navideño” de su nombre para no molestar a nadie.

En él participaron 55 comercios y bares de todo el Valle de Egüés y se podía ganar en cualquiera de las categorías existentes: premio al mejor escaparate, premio al mejor local y premio a la mejor atracción comercial. El ganador de cada una de las categorías ha recibido un trofeo conmemorativo, 700 euros después de impuestos y una inversión de 300 euros en promoción publicitaria.

El premio al mejor local fue para la Farmacia Sarriguren, que durante la época navideña colocó una gran cueva y puso un portal fabricado con vasos y palets.

El ganador del premio al mejor escaparate ha sido otro negocio de Sarriguren, KIMUZ, el espacio de trabajo compartido o coworking. En su creación, usaron un árbol adornado con elementos de trabajo de cada una de las personas que usan sus servicios.