El ex alcalde no quiso declarar como imputado por la desaparición del bar prefabricado del campo de fútbol de Sarriguren.

Josetxo Andía estaba llamado a declarar el pasado lunes 27 de julio y se negó a hacerlo. Su abogado pidió la suspensión del proceso debido a que le faltaba información, según alegó. La juez se negó ya que había tenido tiempo suficiente desde que fue notificado el 2 de julio por la denuncia que interpuso el actual alcalde Alfonso Etxeberria.

También había sido llamada a declarar la ex concejal delegada en Hacienda y Personal en aquel momento, Carolina Potau, pero consiguió aplazar su citación hasta el próximo 25 de agosto ya que se encontraba en un viaje.

Hasta el momento han declarado varios testigos relacionados con el caso como trabajadores públicos, el asesor jurídico, la técnico de deportes, así como miembros de Nasipa. Precisamente las la declaración de estos últimos es cuando se llamó a declarar tanto a Andía como a Potau.

En enero de 2014 fue denunciada por el actual alcalde Alfonso Etxeberria la desaparición del bar prefabricado que estuvo en servicio hasta el año 2009 en la Ciudad Deportiva de Sarriguren.

Estos módulos costaron casi 155.000€ a las arcas municipales cuando se adquirieron en octubre de 2003, y estuvieron en funcionamiento junto al campo de fútbol hasta el año 2009. En mayo de 2010 se inauguró la actual cafetería.

El ayuntamiento inició la búsqueda del bar prefabricado con intención de usarlo como almacén para los huertos ecológicos que a principios de 2015 entraron en funcionamiento en Sarriguren.

En su día se valoró en 13.000€ el desmontaje y traslado de estas instalaciones por parte de Nasipa, pero en un informe solicitado por la juez instructora, se valoran las instalaciones en 119.000€. Nasipa solicitó formalmente al ayuntamiento la cesión de los módulos a cambio de desmontarlos, petición que fue denegada. A pesar de eso, la empresa los desmontó finalmente y ahora dice desconocer su paradero.