El espectáculo del todo vale continúa en el Valle de Egüés, y tristemente la clase política avergüenza a sus habitantes una vez más por aparecer en la presa local únicamente por la actitud de los que nos gobiernan.

Durante mucho tiempo las irregularidades por parte del alcalde de UPN y su grupo municipal han sacado los colores de nuestro ayuntamiento en los medios de comunicación. Sólo hemos sido noticia por temas de corrupción. Lejos de cortar por lo sano, en la dirección de UPN se ha mirado hacia otro lado hasta que no han tenido más remedio que hacer frente al asunto, y aún así han pasado casi de puntillas por un problema creado por un alcalde de su partido en el cuarto municipio más grande de Navarra, después de Pamplona, Tudela y Barañáin.

Pero para entonces cuatro partidos políticos, cuatro, habían decidido aliarse contra natura para arrebatar la alcaldía al partido más votado. Es cierto que en nuestra democracia eso está permitido, pero no deja de ser llamativo que cuatro partidos con idearios tan contrapuestos, hagan lo que sea necesario para sentarse en la silla de este Juego de Tronos.

NaBai como segunda lista más votada, con 4 de los 17 concejales del Ayuntamiento, se haría con la alcaldía gracias al apoyo del PSN, I-E y Bildu, que se verían recompensados con dos tenencias de alcalde. En este juego de las sillas todos ganan, porque lo importante es gobernar, aun dentro de esta torre de Babel de siglas políticas.

Por supuesto la dignidad del PSN está a salvo, ya que ellos pusieron como condición que Bildu no entrara en el reparto de poderes, pero están de acuerdo en recibir su voto para poder asegurarse poder tocar la vara de mando.

Y cuando todo parecía hecho, UPN propone aupar a Mikel Bezunartea, del PSN, como alcalde con tal de que no gobiernen los nacionalistas, aunque el líder de la agrupación local dice “no sentirse legitimado e encabezar el ayuntamiento” dado que cuenta con 2 de los 17 concejales. Y es que los sentimientos son muy caprichosos, porque el de la legitimidad cambia si se trata de aupar a otros que tienen 4 de los 17 concejales.

Veremos cómo acaba este culebrón invernal con un nuevo candidato al poder. El próximo martes 19 de marzo descubriremos si la alcaldía sigue en manos de UPN si finalmente el PSN no recibe la autorización de apoyar a Alfonso Etxeberria de NaBai, si es éste quien se hace con la alcaldía o si es finalmente Mikel Bezunartea del PSN quien se la queda con el apoyo de UPN.

Lo importante es gobernar, porque la ética en política no existe.